Salida en autobús para un recorrido panorámico de Ajaccio, declarada «Ciudad histórico-artística». Tendrá una visión general de los principales lugares de la ciudad. En ella destacan el palacio de justicia, el palacio Napoleón, la plaza del Diamante, donde se alza el monumento ecuestre en bronce de Napoleón y sus cuatro hermanos diseñado por Viollet-le-Duc, la plaza de Austerlitz, adonde, según la leyenda, Napoleón acudía en su infancia, fascinado por los personajes históricos, y soñaba con conquistas y gloria.
Continuación en autobús hacia las islas Sanguinarias. Seguiremos la carretera de la costa que serpentea entre calas salvajes hasta llegar a la punta de Parata. Un sendero permite acceder al gran sitio de Parata. Desde allí se divisa el archipiélago de 4 islotes, integrado en la red Natura 2000. Forma parte del patrimonio natural y cultural de la ciudad de Ajaccio y, de forma más amplia, de toda Córcega. Regreso al barco.
OBSERVACIONES
Salida en autobús para un recorrido panorámico de Ajaccio, declarada «Ciudad histórico-artística». Tendrá una visión general de los principales lugares de la ciudad. En ella destacan el palacio de justicia, el palacio Napoleón, la plaza del Diamante, donde se alza el monumento ecuestre en bronce de Napoleón y sus cuatro hermanos diseñado por Viollet-le-Duc, la plaza de Austerlitz, adonde, según la leyenda, Napoleón acudía en su infancia, fascinado por los personajes históricos, y soñaba con conquistas y gloria.
Continuación en autobús hacia las islas Sanguinarias. Seguiremos la carretera de la costa que serpentea entre calas salvajes hasta llegar a la punta de Parata. Un sendero permite acceder al gran sitio de Parata. Desde allí se divisa el archipiélago de 4 islotes, integrado en la red Natura 2000. Forma parte del patrimonio natural y cultural de la ciudad de Ajaccio y, de forma más amplia, de toda Córcega. Regreso al barco.
OBSERVACIONES
NIZA - AJACCIO - BONIFACIO - PORTO VECCHIO - BASTIA - L’ÎLE ROUSSE - NIZA
«Kallisté»: «la más bella». Así es como los griegos bautizaron a Córcega ya en la antigüedad por su gran encanto. Porque en este paraíso terrenal, parecían haberse reunido todas las maravillas del mundo, bañadas por una ráfaga de luz y un rayo de eternidad. Desde las murallas de la ciudadela hasta el encanto de las calanques, entre azules profundos y colinas salvajes, este crucero llega el corazón del viajero. Y también le lleva a descubrir tesoros insospechados, a través de unas escalas encantadas.