Salida a pie hacia el Castillo de Tarascón. Construido en la primera mitad del siglo XV, el Castillo de Tarascón es una de las fortalezas más hermosas de Francia. Es un ejemplo perfecto de un edificio que, con su arquitectura y decoraciones, combina los estilos gótico y renacentista. Construido sobre una roca baja, en la intersección de rutas terrestres y fluviales que conectan la Provenza con el Languedoc, el castillo servía antaño como una monumental atalaya. Su terraza ofrece vistas impresionantes del río, las llanuras, los Alpilles y la Montagnette. El notable estado de conservación del castillo se debe, en gran parte, a los trabajos de restauración y mantenimiento llevados a cabo por varios arquitectos de monumentos históricos del Estado. Durante la visita al Castillo, descubrirá la botica del hospital de San Nicolás, más de 30 salas y un panorama excepcional del Ródano y la Provenza desde la inmensa terraza del castillo. Regreso a pie al barco.
OBSERVACIONES
Salida a pie hacia el Castillo de Tarascón. Construido en la primera mitad del siglo XV, el Castillo de Tarascón es una de las fortalezas más hermosas de Francia. Es un ejemplo perfecto de un edificio que, con su arquitectura y decoraciones, combina los estilos gótico y renacentista. Construido sobre una roca baja, en la intersección de rutas terrestres y fluviales que conectan la Provenza con el Languedoc, el castillo servía antaño como una monumental atalaya. Su terraza ofrece vistas impresionantes del río, las llanuras, los Alpilles y la Montagnette. El notable estado de conservación del castillo se debe, en gran parte, a los trabajos de restauración y mantenimiento llevados a cabo por varios arquitectos de monumentos históricos del Estado. Durante la visita al Castillo, descubrirá la botica del hospital de San Nicolás, más de 30 salas y un panorama excepcional del Ródano y la Provenza desde la inmensa terraza del castillo. Regreso a pie al barco.
OBSERVACIONES